He pasado una semana en Srinagar, en el controvertido estado
de Cahemira. Al llegar aquí, sorprenden dos cosas, la belleza de sus paisajes
de montaña y la apabullante presencia militar. Soldados armados con metralletas
al hombro se mezclan con la población por toda la ciudad, cuesta acostumbrarse
a verlo.
La inestabilidad política que esta zona sufre desde 1980, ha
dado lugar a tres guerras entre India y Pakistan. Muchos cachemires prefieren
ser independientes de ambos países, y el nacionalismo es un sentimiento muy
generalizado, pero esta zona es un polvorín en el que India, Pakistan y
Afganistan crean una tensión política que la población sufre.
Los cachemires se sienten bajo la dominación india y sufren
la presión del fundamentalismo islámico de sus vecinos, en realidad chocan
también con ellos, son musulmanes de base sufí,
de espiritualidad más abierta.
En el 1990 Cachemira pasó a estar controlada por Delhi,
disturbios de insurgentes y violaciones de derechos humanos del ejercito indio,
provocaron miles de muertos. Hubo un momento
en el que India y Pakistán realizaron pruebas nucleares, la ONU sacó a los
países del borde de una catastrofe.
La industria turística se fue recuperando hasta julio de
2008, cuando estallaron disturbios entre comunidades hindú y musulmana. Desde entonces la situación ha estado
tranquila.
Cuando llegué, acostumbrada a saludar con el precioso
Namasté, continué diciéndolo a la gente
con la que me cruzaba. Algunos de ellos me miraban con cara de pocos amigos,
hasta que uno me dijo “esto no es India, aquí se dice "Assalam Malekum”. Lección
aprendida, guardaré el Namasté para otras zonas y por supuesto, encantada de
utilizar este nuevo saludo cargado de significado y muy bonito también.
Hay que informarse de cómo están las cosas antes de venir,
pero sin duda conocer esto merece la pena. Como siempre lo mejor, la gente y
sobre todo, la gente de mi barrio, se merecen un post para ellos solitos que
escribiré otro día.
Pero si hay que buscar un protagonista, es el Lado Dal, el
corazón de la ciudad. Repleto de houseboats, casas flotantes donde viven
familias y donde se ofrece alojamiento a los turistas de las mas variadas
categorías.
Las shikaras, barcas decoradas con llamativos colores, recorren el
lago y te ofrecen la oportunidad de adentrarte en este vecindario, donde el
sonido del agua es el mayor ruido que escuchas. Unas fotos para demostrar que
no exagero ni un poquito.
Por supuesto di un largo paseo en shikara y visité cuatro o
cinco houseboats, pero decidí alojarme en una guest house, me daba mas libertad
de movimiento, sobre todo cuando me he pasado el día yendo y viniendo de un
sitio con búsquedas y compras.
Estamos en Ramadán, por un lado es una suerte poder conocer
como vive una ciudad musulmana este mes de ayuno y oración y por otro lado es
un fastidio que las llamadas al rezo nocturnas no te dejen dormir.
Me cuesta entender la religión islámica, principalmente por
el papel de la mujer en las sociedades
de esta creencia, pero no quise que mis prejuicios me impidieran descubrir un
poco mas sobre este credo que siguen millones de personas en el mundo. El
fundamentalismo ha hecho mucho daño a la visión que tenemos sobre esta
religión, que tiene hermosos valores
como respeto a los mayores, la familia, la hospitalidad… otros reglas y
costumbres no las comparto, pero trato de no juzgar y tratar de comprender.
La
mejor manera de acercarse a otra cultura o religión es hablar con su gente
sobre ellas, yo me encontré con gente maravillosa, aunque si tengo que decir
que todas las personas que conocí fueron hombres, las mujeres musulmanas de esta
zona no son tan accesibles y no las
encuentras trabajando en tiendas, ni restaurantes. Mi amigo Shoieb, justificaba
esta ausencia diciéndome que durante el Ramadán, ellas estaban mas recogidas en
el hogar. Me da la sensación que el resto del año, las actividades que realizan
hombres y mujeres y su papel en la sociedad no es ni mucho menos el mismo.
Confío que con el tiempo, la igualdad de sexos se vaya produciendo poco a poco.
No hace tanto que en España las mujeres y los hombres tenían sitios distintos
en las iglesias, ellas no podían realizar algunas actividades sin la
autorización del padre o marido y los roles sociales estaban muy marcados.
Los vendedores en las tiendas, los conductores de rickshaws,
los cazaclientes de los houseboats, son realmente insistentes, educados pero
una molestia inevitable. El turismo es su principal forma de vida y de su éxito
en la caza depende su salario.
Lo que realmente es mas molesto son las continuas
insinuaciones y propuestas por parte del sector masculino, te hace estar alerta
y crea una distancia que impide que te olvides que eres una mujer. Hablé de
este tema con alguno de mis amigos (que no por ello dejaron de lanzar sus
dardos también), Mumin, un educadísimo chaval de unos 20 años, me comentaba que
el porno que ven aquí es con mujeres occidentales (blue movies las llaman) y
que esa puede ser una razón de su actitud. Sinceramente, no me parece un motivo para
justificar nada. En ningún momento sentí peligro, ellos lo intentan, pero jamás
con una actitud agresiva ni violenta y una vez que ven que no hay nada que
hacer, puedes mantener una conversación mas o menos de igual a igual.
Mi guest house la llevaba una familia, dos chavales de unos
18 y veintitantos años eran los encargados del trabajo con los huéspedes. Un
dia ya cansada de que me tiraran besitos cuando me veian en la ventana o
tocaran a mi puerta por la noche, les cogí por banda y les calló una buena charla,
aguantaron el chaparrón con la cabeza gacha y no volvieron a molestarme.
Los días que he pasado aquí, he descubierto lugares
realmente bonitos (los jardines mongoles, el templo de Shiva en la montaña, las
mezquitas…) y una ciudad llena de actividad y vida. La naturaleza de los
alrededores en Sonamarg, Pahalgam o Gulmarg, bien merece una o varias excursiones.
Iré colgando post con fotos de algunos de estos sitios, que nunca hacen
justicia a la realidad, pero que sirven para hacerse una idea.
Creo que Srinagar y yo volveremos a vernos.
Assalam Malekum.
ResponderEliminarQué bonito, Marta, (casi) todo lo que cuentas, y no sólo eso, qué instructivo también, no tenía ni idea de qué ocurría en esta zona de la India (o de la No India). Un besote. Sigue así de bien.
Hola Marta, que hermosos lugares hay en la India. Gracias a Dios encontre tu pagina y me dio una idea mas detallada de como es Cachemira. Yo quiero ir este año o el proximo a la India y me gustaria conocer Cachemira.
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